Una solución ingeniosa al problema de las múltiples canales que afeaban la fachada y vertían el agua sobre los transeúntes.La decisión es arriesgada pero sencilla, no disimular para nada las bajantes, evidenciar el problema al máximo, hasta convertirlo en la solución misma.
Apoyándose en el color y el grafismo, manipulando, dirigiendo y encauzando a su antojo el agua de lluvia, no solo han conseguido algo visualmente estético, se ha creado un instrumento para que la naturaleza componga hermosas melodías. Si paseamos por los alrededores un día de tormenta podemos encontrarnos por sorpresa con un grato espectáculo.
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la imaginación del hombre si que consigue sorprenderme siempre
Vaya, que fachada más original!
¿Dónde irá a parar el agua que se recoge?
Sería ideal si se reutilizara…
Simplemente “ME ENCANTA”…. Además de super original, el grafismo utilizado es perfecto. No me importaria para nada vivir en un pisito así… Te imaginas???